
La Garnacha salvaje del Moncayo es un vino que sorprende por su redondez y juventud.
Tras una crianza de 5 meses en barricas nuevas de roble francés, este vino expresa todas las cualidades de la garnacha en esta zona del Valle del Ebro. Un vino afrutado, fresco y de tanino dulce capaz de satisfacer a los amantes de una variedad que poco a poco recupera su protagonismo.
Ficha técnica